El trabajo de investigación y exploración de cavidades en Sierra Morena Cordobesa no para ni un instante y sigue su curso en el año 2017.
En concreto, en estos últimos meses nuestros trabajos espeleológicos se están centrando principalmente en el término municipal de Hornachuelos.
Como ya sabíamos por referencias escritas y orales, además de por las características geológicas de su entorno (gran cantidad de materiales calizos), el potencial espeleológico en Hornachuelos es impresionante y así lo estamos comprobando en cada salida realizada.
Desde que empezara hace ya un año el proyecto espeleológico conjunto llevado a cabo por el C.D. Ambassar y el Grupo Espeleológico G40, el catálogo de cavidades de Hornachuelos ha aumentado exponencialmente, llegando a la cifra de 74 cuevas localizadas hasta la fecha.
El trabajo de indagación (entrevistas a los lugareños) y prospección sobre el terreno para la localización de cavidades llevado a cabo por el C. D. Ambassar (y en concreto de José Cano, que no hay día que pasee con su perro y me dé la noticia de que tenemos una cavidad más para el inventario) está facilitando mucho el trabajo posterior de estudio en sí de la cavidad (informe y topografía).
Cuevas en el casco urbano de Hornachuelos.
Alrededor de una veintena de cuevas han sido halladas en los alrededores del casco urbano, en el Mioceno que se asienta bajo el municipio: algunas naturales y otras excavadas en la roca, ya sea para extracción de material o como uso hidráulico (minas de agua).
Cuevas en El Cambuco (Río Guadalvacarejo).
En el conocido y pintoresco paraje del Molino del Cambuco, han sido localizadas una docena de cavidades (también en las calizas terciarias) en ambas márgenes del Río Guadalvacarejo.
Los hallazgos más significativos que el G40 y el C.D. Ambassar han realizado en este primer trimestre del 2017 han sido los siguientes:
Cueva del Tempranillo.
Tras varios años detrás de ella, por fin un vecino de Hornachuelos nos indicó su localización exacta. Un enorme “cráter” de más de 10 metros de diámetro pasa desapercibido en mitad de una zona de espesa vegetación mediterránea e higueras de gran porte. En este paraje de difícil acceso dicen que estuvo refugiado un tiempo José María El Tempranillo.
Cueva del Guadalora o del Nogal.
Se localizó una nueva boca de acceso y nuevas galerías, ampliando su desarrollo hasta los 541 m, que la sitúa en la cavidad natural con más desarrollo de la toda la Sierra Morena Cordobesa.
Cueva de Las Mujeres.
Una cavidad histórica citada por Bernier o Carbonell e incluida también en un inventario del Grupo Espeleológico de Córdoba de finales de los 60 del pasado siglo.
Cueva HO-73.
Presuntamente usada como refugio durante la Guerra Civil Española, a juzgar por las inscripciones encontradas en su interior.
Cueva HO-16.
De forma casual, y mientras se exploraba una zona en busca de otra cavidad, dimos con una cueva inédita y no explorada hasta el momento. De más de 50 metros de desarrollo explorados hasta el momento, destaca (entre otras características que saldrán a la luz en el informe final de la cueva) por el pozo de su parte final que cuenta con un descenso vertical de 20 metros que hay que realizar usando las técnicas de progresión vertical.
La exploración aun no ha finalizado debido a que faltan algunas incógnitas por resolver.
Dichas cuevas se encuentran todavía en exploración y esperamos ofrecer los resultados obtenidos en el estudio de las mismas antes de que finalice el presente año.
Esperemos que tanto el Ayuntamiento de Hornachuelos como el Parque Natural de la Sierra de Hornachuelos colaboren en este interesante proyecto pues tenemos conocimiento de muchas más cavidades, pero al encontrarse en fincas privadas no es posible acceder a ellas.
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