El pasado Jueves 28 de Diciembre de 2017 tuvimos la oportunidad de entrevistar a uno de los protagonistas de la etapa dorada de la espeleología en la capital cordobesa durante la década de los sesenta y setenta del siglo pasado: José Antonio Magariño, del Grupo Espeleológico de Córdoba (G.E.C.).

Después de varios años tras su pista, al final las redes sociales nos pusieron en contacto gracias al anuncio de la presentación de nuestro libro “Ruta de las Cuevas de Zuheros”, presentado el pasado verano.

Sus inicios en el mundo subterráneo se remontan a principios de 1969, gracias a que su hermano Fernando Magañiño le invitó a que probara la espeleología. Probó, y por supuesto, le gustó.

Durante un par de horas nos estuvo contando anécdotas de aquellos tres años que estuvo en el G.E.C. (1969-1972) de los que guarda un especial recuerdo de la Cueva de Los Murciélagos (Zuheros) donde participó activamente en la exploración, topografía e intervención arqueológica que encabezaba Ana María Vincent:

Me acuerdo mucho de la Cueva de Los Murciélagos de Zuheros, que la llamaban así porque cuando entrábamos a la cueva salía una gran cantidad de murciélagos revoloteando. El año pasado fui a la visita turística de la cueva y solamente vimos un murciélago.

…. Recuerdo que muchos sábados cogía la moto y me iba en solitario de cuevas a la Cueva del Yeso de Baena, a Zuheros… y a una cueva que había en la sierra de Córdoba, antes de llegar a Las Ermitas. Al volver, mi hermano me echaba la bronca por entrar en solitario a una cueva pero afortunadamente nunca me pasó nada.

José Antonio Magariño

En 1972 se marchó de Córdoba y abandonó para siempre el mundo de la espeleología. Hasta ahora, que le hemos “obligado” a revolver cajones, releer documentos y rememorar vivencias.

José Antonio nos facilitó una copia de la documentación que aun obraba tenía en su poder (recotes de prensa, informes, artículos) que sin duda nos servirá para seguir reconstruyendo la historia de la espeleología cordobesa.